Última prueba de Scaloni antes de definir el equipo

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El entrenador argentino mantiene una única duda, por lo que se espera que en esta jornada pare el once que debutará el sábado.

La selección argentina sigue con la preparación para el debut en la Copa América de Brasil ante Colombia, el sábado a las 19, en el estadio Arena Fonte Nova de San Salvador de Bahía.
En la práctica de ayer, luego de realizar tareas de gimnasio, hubo fútbol en espacios reducidos con tres equipos. Lionel Scaloni no paró un once, por lo que sigue manteniendo la misma duda, que es la presencia de Leandro Paredes o Roberto Pereyra en la mitad de la cancha, aunque el ex-Boca corre con ventaja. Sergio Agüero, Nicolás Otamendi y Esteban Andrada son algunos de los que no participaron de este último ejercicio, aunque desde el cuerpo técnico aseguraron que ninguno entrenó diferenciado, ya que realizaron el resto de la práctica con normalidad.
Hoy en tanto, siempre y cuando el clima acompañe, el entrenamiento será a puertas cerradas desde el estadio para hacer reconocimiento de campo. Si llueve, para preservar el terreno, seguirán haciéndolo en Vitoria.
Hasta el momento, los once para enfrentar a Colombia serían: Franco Armani; Renzo Saravia, Germán Pezzella, Nicolás Otamendi, Nicolás Tagliafico; Giovani Lo Celso, Guido Rodríguez, Paredes o Pereyra; Lionel Messi, Sergio Agüero y Ángel Di María.

Brasil, el candidato

El volante del seleccionado argentino de fútbol, Rodrigo De Paul, nominó ayer a Brasil como “el candidato” a ganar la Copa América, a pesar de contar con el astro Lionel Messi en el plantel.
“El candidato por localía y jugadores es Brasil. Nosotros tenemos al mejor del mundo (Messi), pero tenemos que ir paso a paso”, manifestó De Paul en conferencia de prensa, acompañado por el defensor Germán Pezzella, desde la concentración argentina en Salvador, Brasil.
“Debemos ser claros y saber que el candidato es Brasil, pero la gente puede soñar igual. Somos 23 leones que vamos a dejar la vida, aunque no será fácil porque el fútbol se igualó mucho”, apuntó De Paul.
El volante no cree en “las renovaciones” a propósito de los cambios que sufrió el plantel con respecto al que compitió en el último Mundial. 
“En la selección siempre fueron pasando jugadores. Acá vienen los mejores. Los que estuvieron, dieron muestras de que tenían que estar”, indicó el ex-Racing Club.

Argentina y el karma de las finales  

El seleccionado argentino fue protagonista de cuatro de las últimas cinco finales de Copa América, pero no levanta el trofeo desde la edición 1993, disputada en Ecuador. La Albiceleste es el segundo equipo más ganador del tradicional torneo sudamericano con 14 títulos, uno menos que Uruguay, pero en los últimos 30 años la historia le fue esquiva.
La racha negativa en los partidos definitorios comenzó en 2004 en Perú. Luego de once años y cuatro ediciones sin llegar hasta el partido definitorio, el equipo nacional que conducía Marcelo Bielsa disputó una inédita final ante Brasil en la que cayó en la definición por penales luego de haber igualado 2-2.
Esta final se repitió en la próxima edición de 2007 en Venezuela pero la definición fue más abultada y contundente, ya que el seleccionado que dirigía Alfio Basile cayó por 3-0.
Luego de la frustrante eliminación en cuartos de final como local en 2011, Argentina volvió a los primeros planos en Chile 2015 bajo la conducción de Gerardo Martino.
La generación que venía de perder la dolorosa final del Mundial de Brasil 2014 ante Alemania tenía la oportunidad de alcanzar la gloria, pero luego de un apretado partido ante el mejor Chile de la historia, la definición se estiró al alargue y más tarde a los penales donde el equipo del Tata perdió por 4-1.
Un año después, en la insólita Copa América de Estados Unidos, el equipo de Martino volvió a cruzarse con la Roja en el partido definitorio y el desenlace fue el mismo, pero todavía más doloroso. El conjunto nacional fue superior al seleccionado chileno conducido por Pizzi, pero este aguantó y en los penales fue más efectivo.
El golpe de la tercera final perdida en forma consecutiva fue letal para el seleccionado argentino y para su líder, Messi, quien luego del partido anunciaba su renuncia luego de cuatro intentos fallidos.