écnicos del Departamento de Certificación y Calidad Agroalimentaria de la Dirección de Producción Vegetal del Ministerio de Producción de la Provincia llevaron a cabo el pasado 14 de diciembre, una jornada técnica dirigida a productores de tomate del Cinturón Verde de la ciudad de Corrientes. La actividad se desarrolló en el marco del Programa Provincial de Implementación de Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), a través de la Resolución Nº 787/17.
La temática del encuentro de capacitación se enfocó en la incorporación de las BPA al Código Alimentario Argentino (CAA), que establece a partir del 2020 la obligatoriedad de las mismas con el objetivo de asegurar una producción inocua y sustentable. La normativa incluye 7 puntos de cumplimientos obligatorios para toda persona física o jurídica que realiza una o más actividades relacionadas con la producción primaria (cultivo-cosecha), almacenamiento o comercialización (art 154 tris).
Durante la jornada se desarrollaron en detalle 2 de los 7 puntos: -1) Documentación obligatoria y trazabilidad y, -2) Uso de fertilizantes orgánicos y enmiendas. Es de consignar que la trazabilidad de los alimentos es la capacidad de seguir y conocer una o varias etapas de desplazamiento de un alimento a lo largo de su producción, transformación y distribución.
Y la finalidad es poder rastrear un alimento y poder llegar al origen del problema en caso que lo hubiera. Las herramientas con las que se cuenta para cumplir con tal objetivo tienen carácter obligatorio como ser el Registro Nacional Sanitario de Productores Agropecuarios (RENSPA), Registro de Empaques y Documentos de Transito Vegetal (DTV).
En este sentido se comentó la importancia de cada documento como así también los requisitos necesarios para obtenerlos. Una práctica habitual de los productores es la aplicación de guanos y estiércoles crudos en los cultivos de hortalizas frescas.
La frecuencia con que se han manifestado cuadros epidemiológicos puso en discusión la inocuidad de los alimentos. La normativa vigente considera que todo guano y estiércol crudo deberá ser compostado para su aplicación como enmienda orgánica, asegurando de esta manera una carga microbiana mínima.
El compostaje es un proceso biológico que, en condiciones óptimas de humedad, temperatura y aireación, se logra una transformación higiénica de los restos orgánicos en un material homogéneo asimilable por las plantas, evitando una de las causas de enfermedades transmitidas por alimentos (ETA). Con respecto a este proceso se abarcaron todo lo referido a las herramientas y técnicas que se deben considerar para realizar un buen manejo del compostaje.