Riquelme le mandó una camiseta a un olímpico que lo saluda como cábala. El joven entrerriano alzó la medalla dorada y nombró a Román Riquelme en todas las notas que brindó.
El exjugador xeneize respondió los saludos con un regalo firmado.
Nazareno Sasia recordará para siempre estos Juegos Olímpicos de la Juventud. El joven entrerriano de la localidad de Cerrito debió tomar una decisión muy importante para llegar a este momento bisagra en su carrera y su elección lo dejó en lo más alto del podio en lanzamiento de bala.
Con solo 17 años, Sasia resignó el viaje de egresados, pero regresará a su casa con una medalla de oro en el cuello, algo que muy pocas personas pueden experimentar.
“Creo que nada de esto hubiera sido posible sin el apoyo de mí mamá y la abuela, sobre todas las cosas. Pero también tengo que agradecerle a todos los profes y los compañeros de la secundaria, porque ellos me bancaron durante todo el año para que me preparara para los Juegos. Sacrifiqué el viaje de egresados para lograr este objetivo y valió la pena. Fue un esfuerzo que me dio un oro”, aseguró Nazareno.
Sasia jugó al futbol durante su infancia, y se mostró seguro al dedicarle sus buenos lanzamientos a Juan Román Riquelme, el ídolo de Boca, quien se quedó con la medalla dorada en los Juegos Olímpicos de Pekín.
Cuando se le consultó, el entrerriano explicó: “Fue una apuesta con mi entrenador. Es un jugador que respeto mucho y por eso le dediqué el lanzamiento“.
El exfutbolista tomó con alegría el saludo y respondió con un regalo, su camiseta autografiada.
“Nazareno, te felicito, te mando un beso muy grande. Espero que estés disfrutando un día tan lindo como el de hoy. Te mando la camiseta argentina, espero que la disfrutes mucho. Abrazo, campeón“, se ve decir a Román en un breve video que dio a conocer la cuenta de Twitter LaMitadMas1.
Si bien todo marcha con viento a favor, el entrerriano no deja que el éxito lo obnubile: “Ahora voy a participar en Mar del Plata. Primero quiero disfrutar esto y después ponerme a entrenar para el próximo torneo”, explicó Nazareno, quien aseguró que “Japón está muy cerca y no hay que apresurarnos. Todavía falta mucho para empezar a competir en mayores“.
Ahora solo resta cumplir su próximo deseo: repetir la hazaña en los Juegos Olímpicos de París 2024 para sumarse a la historia del deporte mundial.