La investigación se habría desprendido del testimonio de una adolescente de 16 años que habría padecido abusos y delató a su madre, a su tía y a la pareja de esta. Al parecer, los adultos ofrecían a los menores y grababan los abusos sexuales a los que los sometían.
Dos allanamientos concretados en la mañana de ayer en el asentamiento próximo a la curtiembre y en el barrio Quilmes de la capital correntina posibilitaron la desarticulación de una presunta red criminal dedicada a la trata y explotación sexual de menores de edad. La Policía detuvo a dos mujeres y un hombre mayores y rescataron a tres menores y una chica de 20 años con discapacidad mental. En las viviendas hallaron dispositivos electrónicos de almacenamiento de imágenes, teléfonos, vaselina y un cuaderno con extraños dibujos hechos por los chicos, de sumo interés para la investigación.
Según la información a la que tuvo acceso diario época, las redadas se llevaron a cabo en la mañana de ayer por orden del juez de Garantías N°4, Leandro Andrés Maciel, en dos viviendas, una ubicada en el asentamiento del barrio Patono, más precisamente al costado de la curtiembre donde la Policía detuvo a un hombre identificado como E. E. Fernández, de 42 años, y a N. B. Arce de 42.
En ese lugar procedieron al rescate y resguardo legal un menor de 8 años, otro de 9, un adolescente de 16 años y una jovencita de 24 años que padece retraso mental moderado.
Durante la requisa, los efectivos de la Unidad Especial Trata de Personas, juntamente con el personal de la Dirección General de Delitos Complejos y Delitos Informáticos, incautaron cinco teléfonos celulares de distintas marcas y modelos, así como un pendrive para almacenamiento de imágenes, un chip para teléfono celular, un frasco de vaselina líquida pura, una crema marca átomo desinflamante, un CD tipo DVR y un cuadernillo con dibujos que realizaban los menores.
El segundo allanamiento registró y secuestró del material de interés para la investigación, se realizó en un domicilio ubicado en uno de los pasillos del barrio Quilmes, intersección con la avenida Iberá, donde los efectivos policiales arrestaron a la segunda mujer identificada como G. N. Arce de 35 años. En su vivienda la Policía encontró otros cinco celulares, una tablet, un pendrive, un chip sin referencia, una tarjeta de memoria de 16 GB y otro cuaderno con algunos dibujos y escritos.
Investigación abierta
Fuentes inobjetables del caso indicaron que la investigación que llevaba un tiempo habría surgido tras una denuncia formulada oportunamente luego del testimonio de una adolescente de 16 años, hija de una de las mujeres detenidas, quien habría brindado detalles de los sometimientos a los que eran forzados los menores en las viviendas. Todo parece indicar que los menores eran ofrecidos por los adultos, incluso uno de ellos que en este caso sería el padrastro, podría hasta haber perpetrado abusos sexuales contra ellos y se filmaba. Con los elementos incautados durante los allanamientos, la titular de la Unidad Fiscal de Investigaciones Concretas N°3, María Andrea González, comenzó a armar el caso que llegado el momento transferirá a la Justicia federal, indicaron allegados.
Las dos detenidas fueron alojadas en la sede de la Comisaría de la Mujer y el Menor N°2, en tanto que el hombre arrestado en los allanamientos fue trasladado y alojado en la Comisaría Novena. En cuanto a los menores, quedaron a resguardo de los efectivos de la Comisaría de la Mujer y el Menor N°1. La Justicia ordenó la realización de Cámara Gesell para todos ellos para saber a través de sus relatos cuál era la relación entre los menores y los adultos y si recibieron algún tipo de abuso.
