Oscar Ojea, presidente de la conferencia episcopal, señaló que hay cinco millones de kilos de alimentos almacenados por Capital Humano.
Episcopado Argentino, quien señaló “la existencia de dos depósitos de alimentos que tienen cinco millones de kilos de alimentos guardados”.
En ese marco, le reclamó a los funcionarios nacionales que impriman celeridad en esa gestión, dado que de ella depende el alimento de seres humanos.
En ese orden, aseguró: “No entro en las razones por las que están guardados, pero pienso que en un tiempo de emergencia alimentaria esto debe llamarnos a la reflexión”, y agregó: “Rápidamente tienen que ser entregados, esta sensibilidad frente al pan que yo tengo y puede faltar en otras mesas va contra todo lo que significa, por ejemplo, cuando tiramos comida”.
El reclamo se realiza en medio de las presentaciones judiciales que realizó el Gobierno contra las organizaciones que administran la mercadería que reparte el Estado.
El Ministerio conducido por Sandra Pettovello presentó en la Justicia los comprobantes de los 1.607 comedores y merenderos que la cartera “no pudo certificar”, porque ya no funcionaban más, ya sea porque nunca existieron o por haber brindado direcciones falsas. Representan el 47,5% de los 3.385 establecimientos que se relevaron entre el 7 de febrero y el 17 de mayo.
En ese marco, el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina difundió un mensaje en el que remarca la preocupación de la institución que representa por esa situación, y brindó una reflexión coloquial para graficarlo: “Mi abuela materna me decía que cuando tirara un poquito de pan, besara el pan y pensara que ese pan que yo pude comer y que no voy a comer hay otro que realmente lo necesita”.
“Esto es lo que realmente nos preocupa, que se vaya perdiendo esta sensibilidad frente a un derecho que es primario, como es el derecho al alimento”, enfatizó.
De acuerdo a las presentaciones que realizó el Ejecutivo nacional en la Justicia, los denominados “comedores fantasma” pertenecen a organizaciones sociales y piqueteras como el Polo Obrero, el Frente de Organizaciones en Lucha, Libres del Sur, la Corriente Clasista y Combativa, el Movimiento de Trabajadores Excluidos, el Frente Popular Darío Santillán, el Movimiento Evita y Barrios de Pie. La verificación de la cartera de Pettovello indica que sí se acreditaron 1.766 comedores. En total, esos comedores y merenderos asisten a 240.370 personas.
Asimismo, Ojea afirmó: “Dios quiera que rápidamente los hermanos con tantísimas necesidades puedan alcanzar su alimento diario”. “Que este amor fraterno, especialmente con aquellos que no comen o no comen bien, y que este cuidado y esta preocupación por nuestros jóvenes para que no entren en otras adicciones, sean claves para que podamos entrar en este misterio del Dios que es amor, y vivir la bondad, la misericordia y la grandeza del corazón que inspira el mismo misterio de Dios. Que Dios lo bendiga”, concluyó.
Por su parte, el vocero presidencial, Manuel Adorni, aceptó la semana pasada: “Por supuesto que los alimentos se van a repartir y van a llegar a la gente que le tiene que llegar”. Además, recalcó que dichos productos “tienen diferentes fechas de vencimiento, pero no están por vencerse”, y que fueron “adquiridos por la administración anterior”.
“Un buen porcentaje de los comedores eran truchos, no existían o no tenían la cantidad de gente que decían tener”, subrayó el portavoz.
A su vez, un fallo judicial confirmó que el Poder Judicial “no debe ejercer el Gobierno por medio de medidas cautelares”, y que “no existe el peligro en la demora” de entrega de alimentos por parte del Ministerio de Capital Humano.