El partido entre Boca Unidos y Mandiyú por la segunda fecha de la segunda ronda del torneo Oficial de Primera División “A” finalizó 0 a 0. Luego de un primer tiempo parejo, aunque con el Albo más práctico, el Aurirrojo dominó en el complemento, pero falló en la definición.
En otra edición del clásico del fútbol capitalino, Boca Unidos y Mandiyú igualaron este domingo sin abrir el marcador en el partido que puso “al día” la segunda fecha de la segunda rueda del torneo Oficial de Primera División “A”, que organiza la Liga Correntina.
Con un marco importante de público en el estadio ubicado en el complejo Leoncio Benítez, pero menor respecto al primer cruce de la temporada, Boca Unidos y Mandiyú animaron un partido intenso. El primer tiempo fue parejo, con el Albo inquietando más al arquero Rojas, pero el complemento fue todo del equipo local, que dominó a voluntad, pero falló en la definición.
El encuentro comenzó con el Aurirrojo plantado en el campo rival, buscando hacer sentir la localía. No obstante, fue Mandiyú el que llegó con peligro, luego de un quite en la salida del local que terminó con un remate por arriba del horizontal de Guillermo Barreto, cuando se mostraba libre por el sector derecho del área su compañero, Elías Gómez.
El Albo, que fue mucho más práctico en la primera mitad, volvió a inquietar con un tiro libre de Alejandro Ramírez que el arquero Lautaro Rojas tapó arrojándose contra el parante izquierdo.
La primera polémica de la tarde llegó luego de un contraataque de Boca Unidos. La pelota derivó en Elías Medina, que aprovechando el adelantamiento de su homónimo González, se fue en velocidad por el sector izquierdo y al llegar al área enganchó para perfilarse como diestro frente a dos rivales, dando la impresión que Matías Gómez le cometió penal al cruzarle el cuerpo. Nicolás Sosa, que estaba cerca de la jugada, dejó seguir entendiendo que no hubo infracción.
De un mal rechazo de Santiago Chamorro que aprovechó Jorge Forastello llegó un centro que no pudo dominar Mariano Giménez, quedándole la pelota a Jorge Almirón, que enganchó y cruzó un remate de zurda que no llevaba potencia y que pudo atajar sin problemas el arquero Rojas.
De otra pelota recuperada partió una pelota profunda para Forastello, que se metió en el área, y cuando se aprestaba a definir llegó el quite quirúrgico de Joaquín Bogarín para salvar a su equipo.
Al rato, nuevamente Forastello escapó por el sector izquierdo ante la marca de Ignacio Méndez, y luego de un amague sacó un centro que dio en el brazo extendido de Chamorro. Penal que el árbitro decidió omitir.
Sin ser superior en el juego, Mandiyú volvió a tener otra chance. Giménez ganó de cabeza, la defensa local se durmió y apareció por detrás Alejandro Ramírez, de buen primer tiempo, llegando justo el despeje con el pie del arquero de Boca Unidos.
Para el inicio del complemento, entró en el Albo Facundo Sosa por Almirón, lesionado. Con José Monzón suspendido por llegar al límite de amonestaciones, el técnico Víctor Galarza tuvo que improvisar con González como lateral izquierdo, yendo el recién ingresado a marcar el sector opuesto.
Luego de un cabezazo de Sosa, de pique al suelo que atajó Rojas, después de un tiro de esquina, todo fue del dueño de casa.
En una jugada de muy buena factura colectiva estuvo cerca el aurirrojo, cuando Santiago Ávila escapó por la izquierda y jugó hacia atrás para Mariano Gauto, que abrió hacia la derecha para la entrada de Joaquín Acevedo, de gran segundo tiempo, quien sacó un fortísimo remate que se fue apenas ancho.
Al rato, Medina hizo la diagonal para ganarle la espalda a Diego Coronel, y ante la salida de Rodrigo Cantero levantó el balón sobre el cuerpo del arquero, yéndose el remate por arriba del horizontal.
Ávila, también de buen rendimiento en la segunda mitad, le puso el cuerpo a Manuel Barrios Alfonso para irse sólo hacia el gol, y luego de un doble enganche ante el cierre de González, definió con un remate que al arquero Cantero tapó con las piernas.
Al ver que su equipo no respondía en la cancha, el técnico Galarza dispuso los ingresos de Ariel Romero y Carlos Rolón Segovia en lugar de Forastello y Giménez, respectivamente. Y después, agotó las variantes al entrar Lautaro Mendoza por Barreto y Oscar Urbina en lugar de Ramírez.
Sin embargo, al igual que en el primer clásico, Mandiyú se quedó sin respuestas, y el dominio de la pelota y el campo fue de Boca Unidos, que siguió buscando el desequilibrio.
El conjunto local volvió a desperdiciar una gran chance cuando Méndez se proyectó por la derecha y envió un centro al segundo palo que el recién ingresado Gastón Segovia (entró por Medina), en lugar de cabecear directo al arco, decidió bajar para Ávila, quien intentó superar a su marcador con un sombrerito, pero se le fue largo el control y despejó un rival.
Marcos Toledo se jugó en busca del triunfo con el ingreso de Agustín Braure por Gauto y de Uriel Cardozo en lugar del extenuado Bogarín. El local estuvo cerca en una gran apilada de Ávila, quien en paralelo a la línea de fondo fue dejando rivales en el camino para asistir con un toque atrás a Segovia, que levantó increíblemente el remate por arriba del horizontal.
Cerca del final, el árbitro Sosa expulsó a Ramiro Schweizer por una falta en la salida de Mandiyú, que dio la impresión que no fue para tarjeta roja, motivando el ingreso de Kevin Morales por Ávila.
Los cinco minutos de tiempo agregado dio la impresión que estuvieron demás, porque el marcador en blanco no se movió. Por como se presentó el partido y la posición en el torneo, el punto le sirvió más a Mandiyú, que con este resultado igualó en puntos a Deportivo Empedrado, al que aventaja por diferencia de goles para quedarse por ahora con el cuarto lugar de la tabla general, mientras que a seis unidades quedó el Aurirrojo, con tres fechas para cerrar la fase clasificatoria.