La medida comenzará a regir la próxima semana y se extenderá hasta el 23 de diciembre. Prohibieron la extracción en lugares específicos para cuidar los cardúmenes.
La Dirección de Recursos Naturales de Corrientes informó que la semana próxima comenzará a regir una nueva veda pesquera en toda la provincia. La medida se extenderá hasta el 23 de diciembre.
De este modo, redujeron a tres días por semana el ejercicio de la pesca comercial, que podrá ejecutarse únicamente los lunes, martes y miércoles. Continuará habilitada la pesca deportiva o recreativa con devolución de todas las especies.
Además, quedará prohibida toda modalidad de pesca en el tramo del río Paraná comprendido entre la línea imaginaria que une la Cabaña Don Julián y el destacamento de Prefectura Naval Argentina, en la Isla del Cerrito, hasta la zona denominada “Los Cables”, en el resto de las aguas jurisdiccionales de la provincia.
“Esto tiene una carga social, ya que una veda total imposibilitaría el trabajo a muchos guías y cabañeros. No es antojadizo lo que estamos haciendo, se balancean todas las variables”, manifestó el director de Recursos Naturales de Corrientes, Agustín Portela, en diálogo con la radio de la Universidad Nacional del Nordeste (Unne).
En la Disposición N° 605 difundida ayer, la Dirección de Recursos Naturales aseguró que “la modalidad de acceso al recurso implementado en la provincia ha sido consensuado con las restantes provincias de la cuenca, pretendiendo tener un enfoque ecosistémico del recurso, que asegure su racional aprovechamiento”.
Controles
“Por más que pongamos una lancha en cada lugar, sin responsabilidad social no vamos a avanzar. El recurso es importante cuidarlo, por eso hay que bajar la presión pesquera. Estamos con mucha presencia, no tenemos el personal suficiente pero estamos capacitando a más gente con nuestros guardafaunas y el Gobierno nos va a apoyar con más lanchas y vehículos para controles en tierra”, explicó Portela en relación a los reclamos por mayores controles. Por su parte, el director del Instituto de Ictiología del Nordeste (Inicne), Juan Pablo Roux caracterizó el conflicto por los controles en el río Paraná.
“Hay dos miradas muy diferentes de los controles y se trata de converger entre ambas para mejorar el uso del recurso. Desde la Dirección de Recursos Naturales aseguran que los controles en agua y tierra se hacen, pero son pocos para las situaciones complicadas que se presentan en determinadas épocas y eso genera conflicto. Corrientes tiene la característica de que en la zona del Alto Paraná solo se hace pesca deportiva y la mayoría de la gente que va a esa zona hace pesca y devolución, sin embargo se observan artes de pesca ilegales como espineles, tramperos, patos. y la gente que tiene servicio de pesca pide a Recursos Naturales controles más exhaustivos porque dificulta las áreas donde se hace pesca deportiva”, expuso el investigador de la Unne.
“Paraguay continúa con la veda tradicional sin importar los datos técnicos, es una cuestión cultural que no tiene sustento científico. En Corrientes, en cambio, se controla que haya pesca con devolución y que no haya un esfuerzo brusco en la zona que pueda haber cardúmenes. Allí se va a activar el protocolo para evitar que haya tantas embarcaciones en ese lugar”, explicó
“Las herramientas para manejar los recursos pesqueros son muchas pero hay que destacar un cuarteto: educación, conocimiento de la normativa, controles y responsabilidad del pescador”, agregó Roux.
