Pasó a saludar a los jugadores y dijo: “no pedí explicaciones, se tomó la decisión y uno la respeta, para eso están los que toman decisiones”.
Sebastián Battaglia, quien en la noche del miércoles fue despedido de su cargo como entrenador del plantel de Boca Juniors 44 días después de haberse consagrado campeón de la Copa de la Liga, se despidió ayer del plantel en el predio que el club posee en Ezeiza y antes de irse destacó que “respeta la decisión” y que la Copa Libertadores se convirtió en “una obsesión” para los Xeneizes.
“Se me comunicó que dejé de estar al frente del equipo. Respeto la decisión y vinimos junto al resto del cuerpo técnico a despedirnos de los muchachos del plantel y desearles la mejor de las suertes a partir de ahora”, expresó Battaglia en diálogo con los medios de prensa antes de abandonar el lugar.
El ex entrenador boquense llegó al predio alrededor de las 8 en su auto y se reunió a las 9 con los jugadores para despedirse, luego de que el equipo quedara eliminado el martes pasado en octavos de final de la Copa Libertadores como local contra Corinthians de Brasil, en una tanda de penales.
“No pedí explicaciones, se tomó la decisión y uno la respeta, para eso están los que toman decisiones. Sólo acepté y les agradezco a los jugadores por el esfuerzo que hicieron, a la gente de Boca porque siempre alienta y da su apoyo y me voy conforme con lo que fue esta etapa, dejándole dos estrellas más al club y habiendo hecho cosas buenas, me llevo todo eso”, añadió Battaglia.
Battaglia fue campeón de la Copa Argentina 2021 y la Copa de la Liga 2022 (clasificando para la Libertadores 2023). De este logro apenas han pasado 44 días, pero la eliminación ante Corinthians marcó su despedida, tras igualar los dos partidos sin goles y caer en la serie de penales en La Bombonera.
“La Copa Libertadores en este club se ha convertido en una obsesión y los procesos y los proyectos son difíciles de mantener y sostener en el tiempo. Quedamos fuera de la Copa en un partido en el que me siento identificado y la eliminación termina siendo por penales, esa vía que nos ha dado muchas alegrías en otros momentos y que esta vez no tocó quedar afuera”, aseguró el entrenador santafesino, de 41 años.
En su paso como director técnico de la Primera División boquense -antes de reemplazar a Miguel Ángel Russo estaba como DT de Reserva-, Battaglia sumó 55 cotejos, con 29 victorias, 16 empates y 10 derrotas.
En cuanto a su relación con Juan Román Riquelme, vicepresidente y responsable del fútbol en Boca, señaló: “Román me dio esta oportunidad de estar al frente del equipo. Fueron sucediendo cosas que no están dentro de lo que uno piensa y diferentes opiniones en el ciclo. Siempre fui leal y firme con mis valores, tengo mis pensamientos, existen diferencias que a veces se notan”.
Con Battaglia abandonaron el club el cuerpo técnico compuesto por el tucumano Juan Krupoviesa como ayudante de campo, y el preparador físico Zacarías Gaggero, mientras que es probable que Mariano Herrón continúe ligado al club como ya lo hizo cuando fue despedido Russo.
En la conferencia de prensa pospartido, Battaglia hizo declaraciones sobre la falta de refuerzos, pero el DT no cree que eso haya sido determinante en la decisión del club de acelerar su salida pese a que tenía contrato hasta el 31 de diciembre.
“Lo de la conferencia fue mucho mas allá de lo que es. Ningún jugador me manifestó absolutamente nada, tuve la oportunidad de hablar con ellos y pude mirarlos a la cara y hablar de manera normal con todos; no sé si fue por eso, de mi parte no lo veo así”, aseveró quien durante su etapa como futbolista obtuvo 17 títulos, para convertirse en el más ganador de Boca en toda su historia.