Existen al menos dos comunicaciones del Bureau Federal de Investigaciones (FBI) en conexión con la investigación que lleva adelante el juez Federico Villena en torno al avión venezolano-iraní incautado en Ezeiza y con su tripulación retenida en el país. Una de ellas es el informe que afirma que el capitán de la aeronave, Gholamreza Ghasemi, está “asociado” al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de la República Islámica de Irán y al Hezbollah del Líbano, ambos acusados por el atentado terrorista contra la Amia, de 1994-, “Ghasemi es CEO y miembro del consejo de administración Qeshm Fars Air”, señalan. Un segundo informe, menos conocido, brinda información sobre las prohibiciones que pesan sobre Al Quds y Hezbollah y su relación con Mahan Air, la línea propietaria del Boeing 747 que está en Ezeiza y en el que viajaban catorce venezolanos y cinco iraníes, entre ellos Ghasemi.
En dicho informe, se le aclara al juez Villena que a menos de que el FBI lo autorice, no puede usarse “la información en ningún procedimiento legal, divulgar la información a ningún otro gobierno, persona limitada a un proceso legal formal o contacto directo con las personas/entidades a las que se hace referencia o tomar medidas de investigación abiertas”. Su propósito es la inteligencia y colaborar con la investigación.
Se omite dar los nombres de quienes firman el documento, que en el final señala que la Oficina de Control de Activos Extranjeros sancionó a Mahan Air de conformidad con una orden ejecutiva, la 13.224, “por proporcionar material financiero o soporte tecnológico para el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de Irán Fuerza Quds (a la que identifica por sus siglas Irgc QF). Y afirma que “la aerolínea también ha transportado armas y personal para Hezbollah”. En lo que hace a la relación entre las Igrc-QF y Hezbollah, el FBI detalló que el 25 de octubre de 2007, el Departamento de Estado designó bajo la Orden Ejecutiva 13.382 una “entidad iraní clave de preocupación en materia de proliferación”. El Departamento del Tesoro también identificó al Irgc QF bajo la Orden Ejecutiva 13.224 por “proporcionar apoyo material a los talibanes y Hezbollah”. Y contextualiza: la Fuerza Quds ha tenido “una larga historia de apoyo a las actividades militares, paramilitares y terroristas de Hezbollah, brindándole orientación, financiamiento de armas, inteligencia y apoyo logístico”. Luego, el informe le hace al juez una descripción de donde opera la Fuerza Quds, de la que se señala como miembro al piloto Ghasemi. Opera campos de entrenamiento para Hezbollah en el valle de Bekaa en El Líbano y, según se reporta, ha entrenado a más de 3.000 combatientes de la milicia libanesa en las instalaciones de entrenamiento del Irgc en Irán.