Los gremios de los dos sectores anunciaron medidas de fuerza en medio de un reclamo de actualización salarial.
El inicio de la semana se prevé con complicaciones debido al paro del transporte de pasajeros convocado por la Unión Tranviarios Automotor (UTA), un paro de 48 horas de colectivos de corta y media distancia en todo el interior del país que provocará que varios sectores sufran algunos inconvenientes de asistencia o demoras en sus actividades habituales.
Al mismo tiempo, el jueves la Asociación Bancaria de Corrientes confirmó que adherirán al paro convocado a nivel nacional para el próximo jueves 28, aunque informó que el 27 de abril habrá una nueva instancia de negociación.
El paro de transporte comenzará a la 0 hora del martes 26 de abril y se extenderá por dos días. Según explicaron desde el sindicato, la medida de fuerza es para reclamar que los trabajadores del transporte de pasajeros del interior reciban el mismo incremento salarial que les otorgaron a los choferes del Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba).
En la Municipalidad de Corrientes esperan que el Ministerio de Trabajo de la Nación dicte la conciliación obligatoria. En la negociación paritaria entre el gremio y los empresarios representados por Fatap, la patronal ya dejó en claro que no dispone de los fondos necesarios para afrontar el 50% de aumento que piden los choferes. Por ello, reclamaron que tanto la Nación como las provincias incrementen los subsidios y desde el sindicato lanzaron el paro nacional.
En este contexto, en las últimas horas se sucedieron las llamadas entre las jurisdicciones afectadas y el Ministerio de Transporte, movilizadas por el impacto de una medida de fuerza que dejaría sin ómnibus a millones de usuarios de todo el país durante dos días.
Y es fuerte la versión de que se pedirá al Ministerio de Trabajo que dicte la conciliación para que se continúe con la negociación sin afectar el servicio.
Luego de reuniones con el sector patronal, y con la intermediación del Ministerio de Trabajo de la Nación, las entidades se aferran a la idea de aumentar los salarios de acuerdo a lo que preveía el Gobierno a través de su proyecto de Presupuesto 2022, y no a lo que está indicando el Indec. En este sentido, la Asociación Bancaria anunció que el jueves próximo los bancos no abrirán sus puertas al público en señal de protesta.
Juan Lescano, titular de la seccional Corrientes de la Asociación Bancaria, explicó que en la provincia los trabajadores están convocados a asistir a sus lugares de trabajo “pero sin prestar servicios”, ya que la idea es encontrarse e informarse sobre la medida de fuerza. “Las reuniones paritarias tendrían que haber arrancado a mediados de marzo. Ya a esta altura tuvimos demasiada paciencia”, señaló el dirigente gremial, quien subrayó que el pedido del 60% en dos tramos “no es un porcentaje antojadizo”, sino que es el que las mismas cámaras bancarias están reconociendo cuando elevan al Banco Central el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) con su pronóstico inflacionario.
“Buscamos un consenso entre la rentabilidad que tuvieron los bancos y cómo nos golpea en el bolsillo la inflación por los aumentos de los formadores de precios”, se explayó Lescano. Al tiempo que comentó que desde las entidades bancarias se ofreció un 40% en un principio para pasar a un 45% en una segunda instancia pero en 7 u 8 cuotas.
SIN COLECTIVOS
Mientras tanto, la UTA también anunció un paro general de actividades desde el martes, por 48 horas, en todas las líneas del transporte de pasajeros de corta y media distancia del interior del país, por la falta de acuerdo salarial en el marco de las paritarias.
A través de un comunicado, la Unión Tranviaria Automotor de Corrientes comunicó que los choferes adherirán a esa convocatoria, ya que consideran que se agotaron las “gestiones necesarias a fin de lograr el aumento salarial para los trabajadores del transporte de pasajeros del interior del país”. Así, resolvieron un paro general de actividades que comenzará el martes 26 de abril a partir de la 0 hora y que se extenderá hasta la primera hora del jueves.
“El Estado nacional viene asistiendo, altamente, a un sistema de transporte que es responsabilidad exclusiva de los gobiernos provinciales, quienes no solo han abandonado todos los ámbitos de negociación paritaria, sino que desconocen las reiteradas invitaciones a participar de la discusión salarial”, relata el documento compartido por la delegación gremial local.
Asimismo, aunque admiten todas las consecuencias que acarrea el accionar gremial, solicitaron “participación, compromiso y aporte para un sistema del que son nada menos que los titulares únicos, pese a lo cual se han desentendido sin asumir su rol”.
Subsidios: fondo especial de $920 millones
El Gobierno provincial constituyó un fondo especial por 920 millones de pesos destinado al pago de subsidios a empresas prestadoras del sistema de transporte público de pasajeros urbano e interurbano. A través del Decreto Nº 196, el Poder Ejecutivo de la Provincia destinó el pasado 4 de febrero casi mil millones “al pago de subsidios a empresas prestadoras del Sistema de Transporte Público de Pasajeros Urbano e Interurbano de la Provincia de Corrientes”.
La medida, publicada en el Boletín Oficial recién el pasado 18 de abril, no menciona si los recursos son nacionales, solamente registra y articula el pago a las diferentes empresas concesionarias del transporte público en todo el territorio provincial.
De acuerdo a lo establecido en el decreto, el fondo se integrará inicialmente por 920 millones de pesos y se dispone además que Hacienda abonará mensualmente los subsidios de conformidad con el listado de beneficiarios y montos; el que como anexo forma parte del presente decreto.
Cabe recordar que los fondos provinciales son complementos de los recursos que en concepto de compensaciones sigue girando el Estado nacional para atender al sector del transporte urbano e interurbano.
Durante el año 2021 se estima que el Estado nacional destinó más de 540 millones de pesos en concepto de compensaciones para empresas correntinas. En el caso de la ciudad de Corrientes, que concentra la mayor parte de las empresas y el mayor costo de servicio, también el Municipio capitalino aporta subsidios para el sector, aunque de menor cuantía y de manera excepcional.