El 35,2 por ciento de los trabajadores que habitan en la Capital provincial está debajo de la línea de pobreza, de a cuerdo a los datos publicados recientemente por la Provincia. Entre los ocupados informales, la cifra asciende al 48,2 por ciento y en los registrados, baja al 21,8.
Recientemente, la Dirección de Estadísticas y Censos de la Provincia difundió su más reciente Informe sobre Pobreza e Impacto de Planes, correspondiente al último semestre de 2021 y realizado a partir de la Encuesta de Calidad de Vida en la ciudad de Corrientes.
Fue ese mismo informe el que utilizaron el gobernador, Gustavo Valdés y funcionarios de su administración para refutar los últimos datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), que midieron en la principal ciudad de la provincia un 27,3 por ciento de pobreza y un 7,6 de indigencia. La medición local arrojó que el 41,5 por ciento de los capitalinos es pobre y el 5,8, indigente.
El 37,3 por ciento de las personas que se encuentran por debajo de la línea de pobreza se trabaja. Por otra parte, esta cifra asciende al 52,2 por ciento para aquellas personas que no son pobres.
INFORMALIDAD
En cuanto a las características de los trabajadores pobres, lo principal que se puede destacar es que el 59,7 por ciento es empleado u obrero y, de estos, el 39,4 se encuentra trabajando en la informalidad.
Si se considera solamente los trabajadores pobres del sector privado, el empleo no registrado asciende a 74,6 por ciento. La informalidad presenta una de las principales variables explicativas de las diferencias de ingreso en los trabajadores, dado que un trabajador registrado cobra en promedio más del doble que un trabajador no registrado.
Respecto a la población desocupada, el 69 por ciento se encuentra bajo la línea de la pobreza. El 43,9 por ciento de los pobres es inactivo y, de ellos, el 78,4 no trabaja ni estudia porque se debe ocupar del cuidado del hogar o tiene alguna incapacidad.
NIVEL
EDUCATIVO
Por otra parte, el ingreso promedio de la ocupación principal crece a medida que aumenta el nivel educativo. De esta forma, el 46,5 por ciento de los trabajadores que tienen un Nivel Secundario incompleto o menos es pobre. En cambio, dentro del grupo de trabajadores con Nivel Universitario (incompleto o completo) sólo el 11 por ciento es pobre.
INGRESOS
En el segundo semestre de 2021, el ingreso familiar promedio de los hogares pobres fue de 42.588 pesos, mientras la Canasta Básica Total tuvo un costo de 62.048 pesos, por lo que la brecha se ubicó en 31,4. De esta manera, la distancia entre el ingreso total familiar promedio y los ingresos básicos que un hogar debe tener para estar por encima de la línea de la pobreza, fue de 19.460 pesos.
En cuanto a los hogares indigentes, el ingreso familiar promedio fue de 16.710 pesos, mientras la Canasta Básica Alimenticia alcanzó los 23.923 pesos, por lo que la brecha se ubicó en 30,2 por ciento. De esta manera, la distancia entre el ingreso total familiar promedio y los ingresos básicos que un hogar debe tener para no ser indigente fue de 7.213 pesos.
EDADES
Respecto a los grupos etarios, el informe expuso que el impacto de la pobreza es mayor en el segmento etario de 0 a 14 años, donde el 53 por ciento de los niños y adolescentes es pobre. Por otro lado, en cuanto a la indigencia, el impacto es significativamente menor en el grupo etario de mayores de 64 años en, donde se observa que solo el 0,4 por ciento de los adultos mayores se encuentra en esa condición.
AYUDA ESTATAL
Por último, se identificó que la pobreza en la ciudad baja a 38,56 por ciento y la indigencia a 4,1 si se mide el impacto en los ingresos familiares de las ayudas gubernamentales locales, como el Plan Alimentario Corrientes, la Tarifa Social de Agua, la Tarifa Social de Energía, la Tarjeta Verde de Agua, la Tarjeta Verde de Energía, la Tarjeta Mbareté, la Tarjeta Sapucay y el Boleto Gratuito de colectivo.
