Al igual que el correntino Valdés, el gobernador Rodolfo Suárez dudó de la estadística y pidió que no se distorsionen los datos.
El gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, puso en duda ayer los índices de pobreza difundidos por el Instituto Nacional de Estadística y Censo (Indec), y pidió que no se “distorsione la información por motivaciones políticas”.
El mandatario cuyano reaccionó ante los índices difundidos por el organismo en cuanto al Gran Mendoza, que en el ítem pobreza supera al promedio nacional, a tono con su par de Corrientes, Gustavo Valdés, que tuvo cuestionamientos similares sobre esos datos, aunque por razones inversas.
A nivel nacional, el índice de pobreza retrocedió al 37,3% en el segundo semestre del año pasado, por debajo de la medición del primer semestre, cuando fue del 40,6%, mientras que se había registrado un 42% en igual semestre de 2020.
No obstante, en el Gran Mendoza, el 44,6% de las personas fue considerada pobre y el 7,2% indigente, durante los últimos seis meses de 2021.
“Esperamos que las instituciones sean serias y que no se distorsione la información por cuestiones políticas”, expresó Suárez durante el acto del aniversario del inicio de la Guerra de Malvinas, en la Casa de Gobierno.
“Me llama la atención, sin lugar a dudas. No quiero adelantar una opinión concreta y contundente, porque estamos estudiando esos números. Ha crecido el empleo en la provincia, por lo que algunos datos resultan contradictorios en sí mismos. Como el caso de Corrientes y otras provincias, estamos revisando esos índices”, sostuvo Suárez.
El gobernador mendocino hizo mención a los cuestionamientos que también realizó su par correntino, sobre los datos de pobreza difundidos por el Indec.
El mandatario cuyano reaccionó sobre los índices difundidos por el organismo en cuanto al Gran Mendoza, que en el ítem pobreza supera al promedio nacional, a tono con su par de Corrientes, Gustavo Valdés, que hace unos días también tuvo cuestionamientos similares sobre esos datos, aunque por razones inversas.
Es que en el Gran Corrientes (capital y adyacencias) ese índice se ubicó en un 27,3% en el segundo semestre de 2021, lo que implicaría una reducción de más de 15 puntos con relación al 42,9% que se había computado en el mismo período de 2020. “Yo no creo en ese número, creo que puede haber un error censal, creo que nosotros estamos en un 41% de pobreza, según nuestros informes”, sostuvo Valdés. “La situación no está fácil, no puede ser que bajemos 15 puntos en este difícil contexto económico y de inflación”, agregó.
Tras las declaraciones del mandatario, desde el Indec dijeron que los procesamiento de los datos “son correctos”, aunque se someterá a revisión la toma de las muestras.
Lejos de salir a celebrar una supuesta mejora en el escenario social, Valdés no ocultó su preocupación sobre el impacto de una medición estadística sobre la definición de políticas provinciales y nacionales. “Si creemos que estamos en Alemania vamos a tomar decisiones erradas”, advirtió, en diálogo con los medios locales.
También hizo foco en los porcentajes de desocupación dados a conocer recientemente por el Indec. “No creo que en Corrientes haya un 2% de falta de trabajo, cuando vemos que la gente pide trabajo en las calles y tiene problemas económicos”, afirmó.
El gobernador Valdés, ya en 2019 cuestionó un informe del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos y en ese marco anunció que la Provincia haría su propio índice de pobreza. En ese entonces el organismo nacional destacó que en la provincia el flagelo afectaba a casi el 50 por ciento de la población.
Corrientes, como Córdoba, Mendoza, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y otra jurisdicción, utiliza esa herramienta con la participación de la Universidad.