La temporada de playas en la Capital correntina se habilitó a principios de octubre y seguirá así hasta abril de 2022, siendo la temporada más larga en todo el país con siete meses de duración. Desde su inicio y con la llegada del calor, se fueron llenando de visitantes, que aprovechan para bañarse en las aguas del río Paraná.
Sin embargo, una de las situaciones que preocupa a las autoridades es la creciente afluencia de público a las playas y balnearios no habilitados, aquellos que surgen de los bancos de arena emergentes en las aguas de río. “Está de moda ir, pero el banco de arena no es ni siquiera una isla, no existe: aparece y desaparece según sube y baja el río”, explicó Juan Fernández Xifra, director de Playas y Balnearios.
El principal problema con este tipo de balnearios pasa por la imposibilidad de controlarlos y establecer límites de seguridad. “Los márgenes que uno tiene alrededor no son márgenes de seguridad, porque uno no sabe dónde termina”, afirmó Fernández Xifra, y añadió que “tienen las bajantes muy abruptas” y eso implica un riesgo.
Más allá del señalado banco de arena, el funcionario también resaltó que se da la misma situación entre los límites de cada balneario: “Entre Arazaty I y Malvinas II, la parte que está debajo de la pata del puente, es una playa no habilitada, donde tenemos un remanso de 26 metros de profundidad y se generan remolinas en el agua”.
Fin de semana tras otro, las redes sociales se llenan de imágenes de personas en este tipo de playas improvisadas. Ante esto, el Fernández insistió en “concientizar a la gente y pedir que no concurra” para evitar tragedias. “Por algo están las playas habilitadas, donde tenemos más de 50 guardavidas, Guardia Urbana, Policía Turística y también gente de salud”, destacó, señalando la tarea de los funcionarios de su cartera con otras fuerzas. Tristemente, este año ya se dieron casos de ahogados por bañarse en estas costas no habilitadas. Ante esto, el Director de Playas y Balnearios instó a la población a no hacer caso omiso a las indicaciones de los guardavidas, Guardia Urbana y Policía, y respetar la cartelería que indica aquellos balnearios no habilitados.
Actualmente son cinco las playas habilitadas en la ciudad: Arazaty I y II, Malvinas I y II, y Molina Punta. Por la pandemia, en un principio de la temporada para acceder a las mismas era necesario descargar un permiso a través de la página del gobierno provincial. Sin embargo, desde fines de septiembre se quitó dicho requisito, recomendando a la población mantener la distancia social y circular con barbijos. En lo que va de la temporada, las mismas ya recibieron más de 70 mil visitantes, incluyendo turistas de todo el norte del país y de Paraguay y Brasil.
Entre los diversos servicios con los que cuentan los balnearios correntinos se pueden destacar los baños públicos con personal de mantenimiento, sillas anfibias para el uso de personas con discapacidad, zona deportiva con cancha de fútbol, voley y tejo, y diversas actividades recreativas como clases de yoga, bachata, salsa, entre tantos otros.
