Desde el Gobierno central, alistan una serie de medidas tendiente a cambiar el humor de la ciudadanía, que en las urnas del domingo 12 evidenció un rotundo rechazo al modelo encarado por el tándem de los Fernández.
El Presidente de la Nación dará una conferencia este jueves, en la que detallará diferentes acciones que impactarán de lleno en los sectores más afectados por la crisis económica latente que ya tiene a casi la mitad de la población en situación de pobreza.
De acuerdo a las últimas informaciones deslizadas por medios porteños, uno de los puntos a mejorar será el salario mínimo, que tendrá una suba del 10 por ciento, alcanzando un incremento del 45 por ciento al cierre del ejercicio anual.
También habría buenas nuevas para la tercera edad. Será mediante un bono (por única vez) de 6 mil pesos para jubilados y pensionados que cobren hasta dos haberes mínimos. O sea, alrededor de 7 millones de argentinos contemplados en dicha medida.
Otro de las estrategias que se anunciarían sería el ya popular IFE (Ingreso Familiar de Emergencia) en su versión número 4, el cual se otorga a los sectores más vulnerables de la economía.
INFLACIÓN DEL 53,5%
En la quinta de Olivos se apresuran en aplicar la batería de medidas con la sazón que le dio la presentación del Indec respecto al índice de precios al consumidor, que a escala nacional trepó al 51,4 por ciento interanual, mientras que, en la región más pobre del país, el Nordeste, la inflación fue superior: del 53,4 por ciento. En detalle, la escalada de agosto fue del 2,7 por ciento en la región, mientras que en el promedio del país fue del 2,5.
De entre los rubros que más subieron en el año, para las provincias del Nordeste, estuvo la de prendas de vestir, que trepó al 66 por ciento. Mientras que la salud subió el 60,9 por ciento, seguido del transporte, con el 60,7 por ciento.