Tuvo sus inicios el 30 de noviembre de 1998 como una maternidad de bajo riesgo, hoy debido a los avances en equipamiento e infraestructura, a la capacidad del equipo humano y a su condición de hospital regional y universitario es la segunda de la provincia, con un promedio de 2.200 nacimientos anuales.
La Maternidad de la Dulce Espera del hospital Ángela I. de Llano, dependiente del Ministerio de Salud Pública de la Provincia, cumple hoy 22 años de servicio. El sector dio sus primeros pasos como una maternidad de bajo riesgo y hoy es la segunda más importante de Corrientes de alta complejidad y donde se realiza un promedio de 2.200 nacimientos anuales.
En este sentido, el ministro de Salud Pública, Ricardo Cardozo, transmitió su saludo de felicitaciones “a todos aquellos profesionales y personal sanitario que pasaron y a los que forman parte de esa prestigiosa Maternidad”. Remarcó que desde el Gobierno provincial “continuaremos invirtiendo para seguir complejizando esta maternidad”.
Por su parte, la directora del hospital Ángela I. de Llano, Silvia Bonassies, recordó: “Esta maternidad de la Dulce Espera, que hoy atiende a pacientes de toda la provincia, se gestó hace muchos años con la ayuda de la residencia de Medicina General. También ya estaba en ese momento el doctor Daniel Vidal y Elizalde Cremonte, que fue uno de los fundadores”.
“Fueron momentos alegres porque todos estábamos muy entusiasmados para realizar los nacimientos, recibir a los niños en un hospital que hasta ese momento era de infecciosos y empezaba en esa fecha a ser un hospital general con maternidad”, agregó.
Dijo que “después de eso, también se creó la residencia de Obstetricia y con ello comenzó a crecer paulatinamente el número de nacimientos, de cirugías ginecológicas y las cesáreas”.
“Tal fue el crecimiento que es la segunda maternidad de la provincia”, remarcó e indicó que “fue mucho trabajo y esmero. El Gobierno provincial amplió permanentemente todo lo que es la maternidad, que también cuenta con una Casa de Madres, una Neonatología ampliada, es decir que pasamos a ser de una sala de partos y un quirófano y una sala de pocas camas a tener una maternidad y neonatología de complejidad”.
Bonassies agradeció “a todo el personal del hospital que trabaja en estos dos servicios, la Maternidad y la Neonatología. Sé del esfuerzos de cada uno de ellos”. “Tengo el privilegio de estar desde los inicios de la Maternidad, por lo que no solamente estoy feliz al ver este crecimiento y seguro que vamos a seguir en ese camino, sino que también al ver a mis compañeros, a los médicos, a las enfermeras, a los residentes que se formaron y se siguen formando en este gran hospital, en esta gran familia que es la Maternidad de la Dulce Espera”, agregó.
La funcionaria dijo “que este hospital siempre defendió la vida y lo va a seguir haciendo, así que hoy más que nunca, reforzamos este trabajo”.