El presidente Alberto Fernández, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodriguez Larreta, decidieron anunciar este viernes la nueva fase del aislamiento social, preventivo y obligatorio.
Según adelantaron fuentes oficiales, la nueva etapa comenzará el 1° de julio y terminará el 17. En total, son 10 días hábiles, ya que hay dos fines de semana y dos días feriados. Se trata de una vuelta a la fase 1, aunque con algunas variantes: se mantienen la apertura de bancos y las salidas recreativas para los niños. En la Capital y el Gran Buenos Aires solo abrirán los comercios esenciales y no habrá salidas deportivas. Las industrias ubicadas en el conurbano también quedarían exceptuadas, ya que cumplen protocolos sanitarios y de transporte específicos.
El objetivo central de la decisión es bajar la circulación de gente, esencial para intentar disminuir el nivel de contagio. La clave, según coincidieron en el encuentro que duró casi tres horas, será el férreo control sobre el transporte público, aunque no adelantaron cómo y quiénes estará autorizados a utilizar trenes, colectivos y subterráneos.