Con una demanda lenta, algo de temor y mucha expectativa se reactivó el lunes la actividad comercial para los negocios minoristas, aquellos que no estaban comprendidos en los de primera necesidad –que continuaron trabajando aún durante el aislamiento social y obligatorio– ni los no esenciales, que habían podido retomar a través del servicio de delivery una semana antes.
Tras la disposición comunicada por el gobernador Gustavo Valdés el domingo, los profesionales autónomos, servicios de atención a la salud y también los negocios de atención al público con venta minorista tuvieron la posibilidad de tramitar su permiso de trabajar en el marco de la emergencia sanitaria.
No obstante, el lunes –por ser el primer día– no todos abrieron la puerta a los clientes: se ocuparon primero de la limpieza de los locales, desinfección general del lugar y de recibir mercadería o acomodar vidrieras, en tanto se encaraban también las gestiones ante el municipio, a través del sitio web (http://comercio.ciudaddecorrientes.gov.ar/web).
“Era lo que estábamos esperando, volver a abrir los locales. Prácticamente todo el comercio minorista tiene la oportunidad de abrir. Algunos estuvieron cerrados por 40 días. Tuvieron que dedicarse a limpiar y organizarse después del parate total”, expresó a Radio UNNE el gerente de la Asociación de la Producción, Industria y Comercio de Corrientes (Apicc), Carlos Vasallo.
Tras los primeros dos días de trabajo, el referente de la cámara comercial evaluó que todavía “hay una cantidad de clientes pequeñas. No se vendió demasiado. Pero tampoco la expectativa era recuperar en dos días lo que se congeló tras 40 días cerrados”, aclaró.
Por otra parte, destacó de manera positiva el respeto de los clientes por los protocolos de “mantener distancias y usar barbijos”. Así, muchos de los potenciales compradores primero “se acercaron a ver los productos, y otros menos concretaron compras”, describió.
No obstante, el gerente de Apicc bregó por “dar tiempo” al nuevo escenario. “No nos va a abarrotar la demanda, implica un cambio de hábito. Y es preferible no tener picos”, sostuvo.
Aprendizaje y nuevos horarios
“El cliente puede comprar, pero debe volver rápido a su casa a continuar la cuarentena. Esas son las condiciones. Estamos aprendiendo a desenvolvernos”, reflexionó Vasallo, en tanto opinó a favor de “preservar la vida, tanto por un potencial contagio del coronavirus, como para aquellos que viven de sus comercios y que con un potencial fracaso comercial y eventual cierre se les cae el mundo”, apuntó.
En ese marco, fue desde la dirigencia de la Apicc desde donde se aconsejó al Gobierno implementar el trabajo del comercio minorista en una franja horaria de 9 a 17. “Se busca fomentar el respeto de la cuarentena, evitar el uso masivo del transporte público. Y que la gente después de las 17 vuelva a sus casas”, argumentó. Aunque aún no se sabe si este nuevo horario corrido, a modo de otras ciudades más grandes, llegó para quedarse. “Cada local tiene la opción de partir el día, pero los comercios minoristas que se habilitan en esta nueva etapa deben cerrar a las 17”, remarcó por su parte el secretario de Desarrollo Económico de la Comuna, Juan Esteban Maldonado Yonna.
Al respecto además el funcionario apuntó que desde el inicio de la cuarentena se otorgaron unas 1.000 aprobaciones a la posibilidad de reanudar la actividad comercial, aunque el pico se registró en las últimas 48 horas.
Respetar y evaluar
“La página de la Municipalidad pide los datos del comercio, el rubro, el CUIT. Y tras verificar que la actividad esté comprendida dentro de las permitidas, se otorga el permiso”, recordó Vasallo.
“Respetar la restricción de los 9 metros cuadrado de superficie por cliente es muy importante”, reiteró a su turno Maldonado Yonna. De ese modo, “se obtiene seguridad dentro del comercio, para el personal y los clientes”, subrayó.
Ambos referentes, tanto el funcionario municipal como el gerente de la Apicc coincidieron en la importancia del rigor en el cumplimiento de los protocolos establecidos. “El domingo o el lunes se volverá a evaluar en las esferas donde se toman las decisiones, cómo funcionó esta primera semana. Lo peor que nos puede pasar es que se haga todo mal, y haya que volver al cierre total”, expresó Vasallo.
