José Mario Candia (22) cumplía 6 años de prisión por robo. Se ordenó el secuestro de las armas de agentes penitenciarios y de policías.
La autopsia reveló que el interno José Mario Candia (22) murió de un disparo de arma de fuego. El informe preliminar se conoció ayer de fuentes oficiales. Está en pleno curso la investigación administrativa y judicial por los incidentes que se registraron, en la siesta del martes 21, en la Unidad Penal Provincial (UPP) Nº 1, situada en la avenida 3 de Abril 57, de la capital correntina.
La causa quedó radicada en el Juzgado de Instrucción y Correccional Nº 3 de María Josefina González Cabañas, Secretaría de Mauro Alejandro Apud Farah. Interviene la Fiscalía de Instrucción y Correccional Nº 6 de Gustavo Roubineau.
Etapa de instrucción
La jueza González Cabañas está a la espera del sumario que debe remitir el Servicio Penitenciario Provincial. Ese informe debe contemplar, entre otros aspectos, los pormenores del incidente. El día, la hora en que comenzaron los hechos, escenario del enfrentamiento, identificación de los autores, testimonios, secuestros de elementos así como detalles del personal que intervino para controlar los disturbios. La pieza a enviar debe acompañarse con fotografías, filmaciones y croquis.
Paralelamente, los peritos irán remitiendo las conclusiones de los análisis realizados a elementos incautados.
También la magistrada debe recibir los informes médicos de la víctima fatal así como de la atención de los heridos. Todo ese material pasará a formar parte del expediente. Una vez que la jueza tenga a disposición esa documentación podrá disponer las medidas que considere pertinentes, independientemente de las órdenes que impartió a partir de los sucesos.
Todos los heridos, entre internos, personal penitenciario y policías, serán citados a brindar sus testimonios en sede judicial, como así también las autoridades del penal y del Servicio Penitenciario. En el avance de la causa surgirán otros nombres que podrían ser o no de interés para convocarlos a declarar. No se descarta que llamen a familiares de algunos reclusos. Todo apunta a deslindar responsabilidades, despejar dudas y reunir pruebas concretas para sostener los cargos al momento de una imputación.
Desbordes y muerte
El martes 21, cerca de las 14, en momento en que la población carcelaria de la UPP Nº 1 se hallaba de recreo, estalló un conflicto.
El motivo que disparó el lío es materia de investigación. Se habría iniciado en un patio donde unos internos se hallaban jugando al fútbol y la pelota cayó en otro sector. En momentos en que un preso pretendió ir a recuperarla, la guardia de prevención lo habría desalentado y esa situación habría generado la reacción de otros que empezaron a arrojar a los agentes lo que encontraban en el suelo en medio de insultos.
Se produjeron corridas y se escucharon las primeras detonaciones de los disparos de escopeta Itakas que se utilizan con munición antitumulto.
También el alboroto se extendió a los pasillos de los pabellones.
Llegaron los refuerzos y las fuerzas tomaron el control del penal. En medio de tensiones iniciaron el traslado de los heridos a los hospitales, entre ellos a José Candia, quien llegó sin vida al hospital Escuela.
Compromiso de aportar a la investigación
El Ministerio de Seguridad informó el resultado de la autopsia que se le practicó al interno que perdió la vida el martes 21, durante una reyerta en la Unidad Penal N° 1.
El titular de la cartera, Juan José López Desimoni, luego de recibir el primer informe forense, confirmó que “la muerte no se produjo por arma blanca o elemento cortopunzante, lo que marca la autopsia es la muerte por disparos de arma de fuego antitumultos”.
De esta manera, el ministro de Seguridad amplió el informe preliminar que había presentado durante la noche del martes el Servicio Penitenciario Provincial.
En horas del mediodía de ayer se descartó que la muerte de José Mario Candia se haya desencadenado producto de un enfrentamiento entre internos.
“Durante el intento de recuperación del orden y la agresión que se daba dentro del Penal, la fuerza tuvo que intervenir y se produjeron disparos de armas de fuego. Todo eso está sujeto a la investigación penal. Vamos a llegar hasta donde sea necesario para esclarecer y ver cómo se actuó, quién fue el responsable y por qué razón se produjeron esos disparos de fuego antitumulto”, subrayó el ministro López Desimoni.
Si bien se aclara que se trata de un informe preliminar de la autopsia, se descarta que el fallecimiento del interno se haya producido por un enfrentamiento entre internos.
Las actuaciones judiciales continúan y desde el Ministerio de Seguridad, el Servicio Penitenciario Provincial y la Policía de la Provincia van a colaborar para que se esclarezca este episodio.
“Nunca tuvo problemas en la cárcel”
“Desde que llegó a la Unidad Penal 1, mi hijo José nunca tuvo problemas con los demás internos. Trabajaba en Shonko y estudiaba dentro de la cárcel”, dijo Erica Maura, madre del preso que murió durante los incidentes del martes.
Recordó que “antes de que lo detuvieran, trabajaba de ladrillero y además tiene un pequeño obraje. Pero la adicción le generó problemas de relaciones con la gente y a causa de ese problema estuvo internado en el Hospital de Salud Mental San Francisco de Asís”.
En declaraciones a Radio Dos, sostuvo: “Mi hijo le robó el celular a una vecina. No lo voy a justificar ni decir que era bueno. Lo condenaron como a un gran delincuente. Estaba pagando por lo que hizo y ahora pido que aquel o aquellos que le quitaron la vida también paguen por lo que hicieron”. Contó que “lo visité hace unas tres semanas. Pero, siempre hablábamos por teléfono. Me había pedido unos papeles de la escuela para empezar la secundaria. Una vez me contó que había problemas con los del pabellón Nº 10 y Nº 3”.