Con una misa en el Día Internacional de la Mujer, la Iglesia católica convocó a varios miles de personas de todo el país a la Basílica. Desde la provincia viajó el arzobispo Stanovnik, otros doce sacerdotes y fieles de distintas parroquias. “La vida es el primer derecho, sin él no puede darse ninguno más”, proclamó Oscar Ojea, presidente de la Conferencia Episcopal Argentina.
En la basílica de Nuestra Señora de Luján, patrona de los argentinos, varios miles de feligreses de todas partes del país se dieron cita ayer para participar de la misa y la marcha a favor de la vida, que convocó la Iglesia desde la Conferencia Episcopal Argentina, y a la cual Corrientes pronunció su adhesión con todos los obispos del NEA.
Con varios días de anticipación en Buenos Aires, el arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik, fue uno de los 12 sacerdotes que estuvieron presentes en representación de esta parte del país, a los que se sumaron tres colectivos repletos de delegaciones de distintas parroquias, familias y jóvenes. Partieron el sábado, para poder participar con banderas celestes y diversas consignas en respaldo al mismo mensaje: la defensa del niño desde la concepción.
La marcha y la misa posterior se organizaron en coincidencia con las celebraciones del Día Internacional de la Mujer, y a pocos días de que el debate sobre la legalización del aborto vuelva a instalarse en el Congreso de la Nación, esta vez impulsado por el presidente Alberto Fernández. A la par, en todas las parroquias de la región se acompañó la jornada con oraciones bajo el mismo lema: “Sí a las mujeres, sí a la vida”.
“La intención de esta invitación pastoral es pedir por la protección de la vida, desde la concepción hasta la muerte natural”, explicaron a través de un comunicado desde el Arzobispado correntino. “Además, no se invita a rezar un domingo cualquiera, sino en el Día Internacional de la Mujer, y en casa de la Virgen de Luján, Patrona de la Argentina, precisamente en el Año Mariano Nacional, donde la Iglesia pone la mirada especialmente en Ella, la Madre de Jesús y Madre de todos”, destacaron.
“Más allá de esta peregrinación a la Basílica, para que nuestra Iglesia toda ore ese día en comunión con el Pueblo de Dios que estará en Luján, se enviarán propuestas litúrgicas para las celebraciones en las comunidades parroquiales y se anima a organizar acciones y gestos especiales en este día”, convocaron.
La experiencia se plasmó ayer en todos los medios nacionales, pero también en redes sociales, donde los feligreses y los representantes de las distintas comunidades correntinas dieron cuenta del acompañamiento a la jornada en la basílica de Luján.
Allí, el principal orador fue el obispo de San Isidro y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor Oscar Ojea, quien aludió al proyecto anunciado por el Gobierno para la legalización del aborto, cuestionando las prioridades establecidas en un país con “altos niveles de pobreza e indigencia”, desnutrición infantil y falta de agua potable. Prioridades que llevan a la elección de “temas que enfrentan a los ciudadanos de a pie” y atentan “contra la fraternidad”.
“Si no hay fraternidad siempre habrá buitres dispuestos a rapiñar nuestro país”, sentenció.
“En esta Eucaristía venimos a celebrar y a agradecer la vida de tantas mujeres, “su presencia insustituible en las familias” y “el lugar cada vez más amplio que tienen en nuestra sociedad”, dijo. Y agregó: “Pero de un modo especial, queremos celebrar y agradecer la cercanía y el compromiso de las mujeres con la vida”.
Obispos del NEA
La convocatoria a participar de la jornada en Luján partió la semana pasada de un encuentro realizado entre todos los obispos del NEA, quienes a su vez estuvieron ayer presentes en la basílica de Luján para concelebrar la misa.
“Decimos sí a las mujeres y sí a la vida, y nos comprometemos a fomentar y acompañar este tipo de iniciativas en nuestras respectivas diócesis”, manifestaron.
“Sostenemos que un pueblo que no respeta la vida, especialmente la más frágil y vulnerable, camina hacia las tinieblas y la muerte, según nos advierte el Señor en su Palabra: ‘He puesto ante ti la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Elige pues la vida, para que vivas, tú y tu descendencia’ (Dt 30,15)”, expresaron.
“Que María de Luján, casa de todos los argentinos, nos anime a optar una vez más por la vida”, instaron al final de texto que está firmado por monseñor Andrés Stanovnik, arzobispo Corrientes, y sus pares: monseñor Ramón Dus de Resistencia; José Vicente Conejero como obispo de Formosa; monseñor Juan Rubén Martínez, actual obispo de Posadas; del mismo modo que las máximas autoridades eclesiásticas de Sáenz Peña (Hugo Bárbaro), Oberá (Damián Bitar), Reconquista (Ángel José Macín), Goya (Adolfo Canecín) y Santo Tomé (Gustavo Montini).
Día del Niño por Nacer
Desde el Arzobispado de Corrientes evalúan recordatorios provida entre el 25 y el 28 de abril, en coincidencia con el Día del Niño por Nacer. “La idea es sumar a los correntinos por la vida y diversos grupos que van a organizar actividades para ese día”, anticipó el padre Ojeda, sacerdote de la iglesia Catedral, en diálogo con este medio. Entre las opciones, analizan instalar stands en la costanera, donde cada grupo y movimiento pueda contar y exhibir las acciones que realiza a favor de la vida y en contra de la despenalización del aborto.
“Se está haciendo mucho”, aseguró el sacerdote, en tanto enumeró diversos programas que implementa la Iglesia correntina –además de otras propuestas ecuménicas o impulsadas por ONG– a favor de instalar este mensaje.
Asesorados por el padre Ojeda y en conjunto con la Pastoral Familiar, se desarrollan en la iglesia Catedral al menos dos programas: uno llamado “Grávida” y otro nombrado como “Sanación Raquel”.
“El primero es un centro de asistencia a la mujer embarazada y al niño por nacer, a quienes se acompaña desde todos los aspectos: contención de salud, psicológica, económica, emocional y espiritual. Desde pañales a cualquier otra necesidad. Unas 70 mujeres integran este grupo”, sostuvo Ojeda. “Es un servicio diocesano que tiene como base la iglesia Catedral, aunque algunas mujeres son también del interior”, apuntó.
En tanto que “Sanación Raquel” apunta a atender a las mujeres o varones que “hayan pasado por el trauma del aborto. Se habla mucho de las consecuencias que deja, del daño que produce. Es un servicio gratuito de la iglesia que cuenta con profesionales para eso”, recordó. Se trata de un programa nuevo dentro de la Iglesia correntina, con casi un año de existencia, donde se está acompañando a tres mujeres en ese trance, definió.
Una experiencia de fe
Nicolás fue uno de los correntinos que acompañó la marcha por la vida de la Iglesia en Luján. “Llegamos unas horas antes de la misa, junto con sacerdotes que viajaron con los peregrinos. Fue una experiencia muy fuerte, con todos los obispos del país que se reunieron para celebrar juntos este día”, describió.
Destacó también la multitudinaria convocatoria. “Al terminar la celebración religiosa, se escucharon testimonios de personas de otros credos. Fue un mensaje ecuménico, donde también evangélicos y judíos apoyaron el mensaje”, destacó.
